martes, 27 de enero de 2009

LEGADO DE AMOR ( POEMA )

No hacía mucho que había formado mi hogar. Tanto mi esposa como yo aún estábamos en la universidad. Cuando nació nuestro primer hijo, mi pareja tuvo que suspender sus estudios mientras yo terminaba aquel año. Sin sacar mi título, tuve que empezar a trabajar. Instalé un pequeño negocio que con el tiempo fue creciendo gradualmente por lo que manejaba mis cuentas en dos conocidos bancos de mi ciudad. Conforme aumentaba la bonanza crecían también las
"Relaciones Públicas"...eran constantes las reuniones con amigos de los bancos, del barrio, de la universidad, etc. Como sucede con mucha gente de ascendencia oriental, tomar me hacía daño ( me subía la presión ). Al principio me cuidaba pero conforme le iba cogiendo el gusto a mi "libertad de papá", le iba cogiendo también el gusto a las reuniones con mis "amigos" ( aunque algunos lo eran de verdad, muy pocos ahora que lo pienso ). El entusiasmo iba en aumento con el pasar del tiempo, como en aumento resultaba la frecuencia en las salidas. Mi esposa callaba pero yo podía apreciar el dolor en su mirada y en su tono de voz cuando, ya ecuánime, me moría de vergüenza y de incomodidad...Para mí, aquello era peor que si me hubiera enrostrado con gritos mis faltas. Un día, mientras mi primogénito jugaba distraídamente en el suelo con sus juguetes, sentí una angustia en el pecho que no cedía...mecánicamente cogí un lapicero y una hoja de papel...en ella volqué todo lo que subconscientemente me estaba lacerando al dejar neciamente que se acumule la culpa. Este poema va dedicado con toda el alma a los padres jóvenes, libertinos, y a las super esposas que los aguantan.

Y, como dijo algún declamador o algún cantante criollo, "dice así" :

Hijo, hijo adorado
para ti guardo impaciente
algo para mí sagrado,
algo en mi mente forjado
que mi ser quiere ofrendarte :
Dos arcas de mis neuronas
forradas con piel de mi alma,
de azul robado del cielo
perlado de mil estrellas
que nadie podría lograr
ni aunque me quisieran dar
el universo por ellas.

Una de éstas contiene
aquello que cada día
escapa del mismo averno;
son dardos que me lastiman
que me abren llagas humeantes,
son cosas que aún lacerantes
sin pretenderlo alimentan
el fuego con que mi nave
se orienta hacia lo infinito.
El día no muy lejano
en que este cofre destapes,
encontrarás sinsabores,
pecados, vicios y errores;
envueltos en un sudario
de dolor y de sufrimiento,
hilado con la paciencia
de quien comprende hijo mío
que las leyes de la existencia
se oponen a lo absoluto :
Existe belleza en lo feo
y un lado bueno en lo malo,
en esto mi pequeñuelo
radica nuestra experiencia.

No temas hijo querido
de usar este cofre un día
pues es veneno enclaustrado
cual una fiera domada.
Si el mismo mal da el remedio
para los cuerpos que ataca,
te entrego así estas vacunas
nacientes de la ponzoña
de esas serpientes malignas
que al ensañarse en mi cuerpo,
solo crearon el suero
que a ti te entrego hijo ansiado.

El otro tan solo guarda
aquello que en tu trayecto
encontrarás a raudales :
Las esperanzas y ensueños
de algo que siempre tarda.
Tendrás también los cristales
que en el crisol de mi vida
fundiendo voy para vos,
mira a otros seres con ellos
y verás entonces mortales
que en escolta silenciosos
transitan tus mismos sendales.

Aborda la nave bien mío
y así al calor de mi amor
hacia otros cielos partamos,
busquemos al ser superior
por vías no mancilladas
que no han sido navegadas
por otros seres mortales.
Conozco rutas, mi niño,
de colores celestiales
bordados por los luceros
que más que astros, pequeño,
son seres llenos de luz,
ellos con una cruz,
dejaron de ser mortales.

Viene ya el tiempo hijo mío
en que comandes mi nave
y cual Cisne Sideral
brotado en otros espacios,
por un camino real
en busca de eternidad
te observaremos pasar,
y todos los que te amamos
seremos los que alumbremos
tu rumbo hacia la verdad.

Yet Sen Lee

viernes, 16 de enero de 2009

CRISIS = CAMBIO

En algún lugar del mundo, había un anciano judío que laboraba como velador en cierta empresa. A cierta hora de la mañana, llegaba un joven que lo reemplazaba en la guardianía en el turno diurno. El viejito lo esperaba con parte de su lonchera que entregaba a su reemplazo antes de salir. Un día, durante el cambio de turno, el viejo se sorprendió al ver cómo abruptamente el reemplazante tiraba, con ira, la comida al suelo; ¡ Estoy cansado de comer cada día lo mismo, ya estoy harto de todo ésto!, le dijo... El velador, sin inmutarse y con serena paciencia, le dijo: "Hijo, tu reacción es exagerada para el hecho, sin duda que los percances acumulados te han llevado a una crisis que busca cualquier pretexto para reventar. Cuando yo era joven, los alemanes me encerraron en un ghetto en donde estuve prisionero con mis paisanos. Allí veía diariamente cuando sacaban a mis amigos para morir calcinados en los crematorios. Al poco tiempo le tocó a mi padre, después a mi madre... yo miraba impotente y paralizado de terror lo que sucedía... pero no podía hacer nada... Eso era en realidad un problema sin solución para mí. Un verdadero problema puede o no tener solución, por positiva o negativa que ésta sea; por lo menos tienes una respuesta..."


Los problemas y los percances, cuando no se afrontan, se van acumulando en el subconsciente hasta el punto en que nos vamos complicando y presionando sin ver claramente de qué se trata específicamente; hasta el punto de terminar con una mixtura informe que no podemos definir, pero que nos va minando cada día. Volviendo líneas atrás, el anciano le explicaba al joven la diferencia entre un percance y un problema. El joven le explica entonces ciertas cosas en las relaciones con su esposa que lo tenían muy tenso. Luego de escuchar, el velador le manifiesta que lo que pasaba es que se estaba ahogando en un vaso de agua; que claramente una serie de cosas insignificantes lo habían llevado a una crisis, que, dependiendo del grado de madurez y el estado de ánimo que conserva una persona; los percances que agobian a ésta, podrían no ser nada para otra persona.


En la filosofía china existe una máxima que reza: " CRISIS IGUAL CAMBIO", y esta sencilla "ecuación literaria" tiene un profundo sentido en nuestra vida. Hay cosas, como la muerte, que no tienen remedio... eso es un problema. Pero hay problemas que nos ponen "cabezones" cuando no encontramos la solución... entonces nos resignamos ante este hecho... sin embargo con el tiempo nos damos cuenta que la insolubilidad de aquel problema tuvo en realidad un sentido positivo que solo podemos percibir con el paso de los días o los años. Cuando en nuestras oraciones pedimos fervientemente por algo y no se nos concede, generalmente nos sentimos traicionados... para después ver la verdad. La biblia dice al respecto que Dios no siempre nos concede lo que le clamamos... pues no siempre nos conviene lo que pedimos...


"CRISIS IGUAL CAMBIO", proverbio que nos induce a pensar que todo percance tiene una salida cuando meditamos con calma sin aturdirnos. Estamos acostumbrados a las rutinas, en nuestra vida usamos ciertas "puertas" por donde entramos y salimos cada día. Pero en cierta ocasión, éstas se cierran y nos mareamos, nos atolondramos; damos vueltas en torno a ellas y porfiamos sin buscar "otras puertas"... y nos quedamos impotentes allí renegando y mascullando nuestros pesares. Pero mediante la serenidad y la ecuanimidad iremos descubriendo "nuevas puertas" que por el tedio y el trajín fácil y monótono; no fuimos capaces de ubicar. Recuerdo que durante el apogeo de las salas de cine, cuando llegábamos un poco tarde a ver una película, entrábamos a dicha sala y caminábamos a tientas... de pronto ubicábamos un asiento en medio de una fila...nos dirigíamos hacia él pisando zapatos y un montón de callos. En cambio, si nos demorábamos prudentemente en el inicio de la sala, nuestra visión se iba aclarando y nos ubicábamos decentemente, sin atropellar a nadie. Vemos pues que ante una crisis, es mejor actuar prudentemente, tomándonos el tiempo necesario para clarificar nuestro camino y encontrar nuevas salidas.



jueves, 8 de enero de 2009

EL TEDIO EN EL AMOR








"El hombre es un animal de costumbres", escuchamos a menudo, y esto es tan cierto como que dos y dos son cuatro. Dentro de tales costumbres una de las más arraigadas e "inevitables", por decir lo menos, es la rutina. Hasta la naturaleza tiene sus rutinas...el sol por ejemplo sale y se oculta todos los días a la misma hora ( dependiendo de la estación, claro)...pero bueno, hablando de los seres humanos, en nosotros la cosa podría ser distinta no?.

Veamos primero algunas consideraciones preliminares hablando de la "dichosa" rutina: - -Recuerdo que durante la nefasta época del terrorismo, la policía ponía a disposición de los ciudadanos, mediante la prensa escrita, unas cartillas de seguridad en donde recomendaban, principalmente, que las personas deberían tener cuidado en la forma como se desplazaban, que deberían tener cuidado en variar la rutina de sus movimientos cada día. Seguramente muchos (entre ellos el suscrito), cumplían con ésto inicialmente para después caer inevitablemnte en la consabida rutina y por lo mismo se cometía el grandísimo error de olvidarse de las probabilidades. Como resultado entonces eran secuestrados o muertos los que menos pensaban en ello.

-Qué persona madura no conoce de aquellas épocas en que la promiscuidad sexual campeaba en la sociedad. Luego apareció el VIH (Sida) y la irresponsabilidad continuaba hasta que los niveles de mortandad alcanzaban cifras peligrosas. Entonces la gente empezó a tomar precauciones...pero no todos...los que volvían a caer "víctimas" de la rutina resultaban afectados y, cuando ésto sucedía ellos, tremendamente soprendidos, se preguntaban: "Por qué a mí ?". Habían caído en el "tedio" de cuidarse y no entendían por qué les había sucedido, lo que en realidad estaban propiciando, como consecuencia de la rutina.

-Con qué esmero nos cuidamos de los amigos de lo ajeno luego que somos víctimas de un asalto...y después?...nos vuelve a pasar lo mismo...la culpable ?...la rutina.

Los terrenos amorosos tampoco están excentos del tedio que produce la rutina. Cuando nos enamoramos vemos a la persona elegida como alguien especial, como la mejor del mundo; casi no vemos sus defectos, solo sus virtudes. Aunque los demás quieran demostrarnos lo contrario a lo que apreciamos...no podrán convencernos; y es que a la persona enamorada no le falta razón pues aunque su elección no sea la mejor del mundo, nadie conoce mejor que ella a su "elegido"; pues para escoger ha debido tener en cuenta algunas características para poder decidir. Pero el tiempo va pasando inexorablememte y las costumbres van arraigándose en la pareja para entrar poco a poco en el facilismo de la rutina. Gradualmente se va soslayando todo aquello que formó parte de la magia amorosa, todo lo que nos atrajo de nuestra pareja y que pudimos pecibir mediante nuestros sentidos se va difuminando a través del tiempo hasta virtualmente "desaparecer" de esa persona, la misma que se va convirtiendo en un ser completamente distinto del que inicialmente escogimos. Qué lejanos aquellos días en que nos derretíamos por el ser amado y qué insoportable ahora aceptar la presencia de la misma persona. Cuando la pareja inicia su vida marital, cuando aún persiste el "color rosa"; ambos cuidan sus propias costumbres, ambos son conscientes de no traspasar ciertos límites que pertenecen al ámbito personal del otro individuo, existe prudencia, tacto, delicadeza...uno está pendiente del otro en lo mínimo. Luego con el tiempo todo ésto va desapareciendo conforme se enraizan las costumbres, cada uno de ellos va cayendo en el tedio y cada vez cuesta más trabajo tener un poco de consideración por el otro sin tomarse siquiera un mínimo de esfuerzo por la pareja. Esta situación es el caldo de cultivo en donde la falta de cuidado del uno hacia el otro conlleva inevitablemente a un status de monotonía que desemboca invariablemente en una etapa de tedio que se va remarcando cada día. Todo aquello que formó parte del atractivo inicial, va diluyéndose para dar paso a la falta de consideración del uno por el otro; cada uno de los integrantes empieza a perder el interés entre sí, el afecto se va sustituyendo por la necesidad de simplemente convivir. La mujer, sobretodo, en aras de sobrellevar la relación; llega a extremos de asumir el papel de una verdadera mártir, máxime cuando ya hay hijos de por medio. El hombre por su parte, en el mejor de los casos, empieza a tomar el trabajo como pretexto para ausentarse del hogar y darle más importancia a los amigos y a la bebida. En el peor de los casos, tanto él como ella, conseguirán otra pareja.

Algunos aderezos que incrementan el tedio

Cuando la rutina se va instalando en la relación de una pareja, cada uno de ellos empieza a perder el sentido de un mínimo de intimidad propia. Es normal que, en el momento de las relaciones íntimas, se muestren y contacten plenamente y sin inhibiciones; pero fuera de ellas ambos deben guardar un mínimo de pudor en aras de mantener la atracción necesaria para ciertos momentos y no tratar de volver eso una rutina. Cada uno de ellos se desnuda en cualquier momento y por cualquier motivo confundiendo esto como parte normal de la relación de confianza entre ambos sin saber que aquello que debe ser un momento especial, se va tornando en un hecho sin importancia. El varón va descuidando su aspecto personal e incluso su higiene y solo da importancia a esto para relaciones extras, fuera de casa. La mujer, aparte de comportarse en el sentido ya expresado en el caso del varón, trata de reaccionar, intentando atraer a su pareja, tarrajeándose la cara con mascarillas de barro, cremas y otros menjunjes; pero en realidad, en muchas ocasiones, solo es un hecho irrelevante porque, mientras su cónyuge solo aprecia el "tratamiento", los resultados de éste solo son vistos, ya fuera de casa, por gente ajena a la relación. Por otro lado la fémina, en un afán de "ahorrar", anda en casa con lo peor de su vestimenta y de su calzado (lo que se agrava cuando usa chancletas y, más aún, si la naturaleza no la dotó de pies "observables"). El hombre, por su parte, en muchas ocasiones llega a casa arrastrándose de borracho y no solo trae un aliento ofensivo sino tambíén viene cargado de pestilencia tanto en su persona como en su ropa. Cierta vez, sin querer, fui testigo de cómo una esposa tuvo que atender al marido que había llegado al borde de la inconciencia y se había defecado en sus calzoncillos; ella había tenido que cargarlo, bañarlo, cambiarlo y acostarlo...encima de todo ello, ni siquiera pudo descargarse increpándole el hecho...Alguien en la casa comentó sarcásticamente: "Ufffff ! parece que hubiera comido basura y lo hubiese asentado con agüita de florero de seis meses"...

La ventaja del amante

Teniendo en cuenta las consideraciones anteriores podemos enfocar una situación en donde a menudo desembocan los episodios de rutinas y tedio.

Habiendo llegado al extremo de no poder soportarse ya dentro del mismo lugar, él o ella se consiguen una "relación extra", la misma que cuenta
con todas las ventajas sobre el ( o la ) titular; como por ejm.:
-Es un hecho que el ( o la ) amante no llegará a una cita sin previo aviso lo que otorga una enorme ventaja a "la trampa". Esta persona esperará preparada para el caso con todos los afeites, cuidados y la ropa adecuados.
-"La titular", en cambio, queda en casa generalmente vestida de harapos, lidiando con los hijos, cansada, de mal humor y tratando de estirar un presupuesto obviamente recortado y "compartido" con la "sucursal".
-Es obvio que la "visita" tiene que disponer de un presupuesto aparte para atender dicha relación pues es muy raro que un ser humano se complique la vida con una persona solo por "amor al deporte". De tal manera que "la espera" a la larga será remunerada y por lo tanto la cita contará con una persona que dispensará toda la atención del mundo, con buen carácter, mucha paciencia y buen humor. "La visita", después del respectivo "round", descargará todos los "pesares", "conflictos", "traumas", "abusos", etc., de que es "víctima" en su "propio hogar"

En fin, sería largo enumerar una serie de situaciones que devienen de los errores que se suscitan en las relaciones conyugales. En adelante, trataré de enfocar el tema por el lado más común, es decir, con la mujer como la principal víctima. En este contexto considero que la principal gran equivocación consiste en que la fémina "titular", consciente de los primeros síntomas del problema que se aproxima; no le pone el interés debido. Viendo ella que el esposo o conviviente deja de lado su acostumbrada rutina de aburrido, descuidado, empezando éste a estar más presentable y acicalado en ciertas ocasiones...y hasta "bañándose" cada vez que va a salir (jajaja); permanece impasible. Estando, pues, la situación asi "cantada", ella deja que las cosas vayan avanzando hasta un punto en que ya no las puede controlar y ...cuando reacciona ya es tarde.

Cuando la cónyuge reacciona, ésta debe ser muy inteligente y sutil (en el caso de que el amor por su pareja subsista y desee conservarlo), pues en caso de exagerar puede llegar a situaciones como ésta :
-Una esposa muy decidida le advierte a su pareja que, enterada del asunto, ella hará lo mismo consiguiéndose también un amante que la pueda mantener y darle una vida digna ya que él hace mucho tiempo no le da para el diario ni hace nada por conseguir trabajo. El marido, conociendo de la "abnegación" y "espíritu de sacrificio" de ella...no le hace caso. Un día llega él a casa como de costumbre y encuentra a su pareja tremendamente decidida y con el equipaje listo. Ante la inminencia del hecho y un poco arrepentido le pregunta si ella lo ha pensado bien...SSSIIII !!!, le contesta la mujer...Entonces viéndose perdido y sin alternativa le dice: "Por favor mi vida...¿ me pueden llevar con ustedes ?".
-Una ama de casa, harta ya de las infidelidades de su esposo y de que éste venga a casa alcoholizado a exigir que ya no quiere seguir comiendo las "porquerías sin carne" que ella preparaba; lo amenaza que, como él no trabaje, ella se verá obligada a conseguirse un amante. El tipo aburrido de la comida y de las amenazas, consigue trabajo. Cuando recibe su primer sueldo. éste llega con el dinero en la mano y la llama parado frente a un espejo. Cuando ella llega a su lado él, enseñándole su sueldo, le dice: "¿Ves este dinero que tengo en la mano?"," sí"; le dice ella. " Bueno, le dice él, esto es mío". Luego volteando hacia el espejo le dice: "Ahora, ¿ves el dinero en el espejo?..."sí" contesta ella..."Pues eso es tuyo". Así va pasando el tiempo hasta que un día la mujer empieza a servir en la mesa comidas con abundante carne de primera calidad. Él, tremendamente sorprendido le pregunta: "Mujer, ¿Y cómo estás haciendo para servir tanta carne todos los días ?...Entonces ella se va hasta el espejo, se desnuda y llama al marido, cuando él llega le dice: " Ves ese cuerpo que está en el espejo?, "sí", le contesta él..." Pues ése es el tuyo" le responde..."Y ahora, ¿ves este cuerpo que está frente a tí?..."Sí", contesta él muy perplejo..." Bueno", dice ella "Pues éste es del carnicero"....(jajaja...jiju).

A modo de conclusión

Después de reír un poco (porque supongo que habrán reído no?), les referiré una pequeña historia antes de terminar el tema que, por cierto, es muy complejo como para dilucidarlo en este sencillo artículo.

Les contaré, a grandes rasgos, el caso de un matrimonio en donde el esposo, un brillante profesional; tenía una próspera empresa en la que la esposa fungía de secretaria. Luego de un tiempo de feliz unión marital, los problemas empezaron porque ella defendía recalcitrantemente sus puntos de vista como buena profesional que también era. Las cosas fueron de mal en peor de tal manera que un día él resultó involucrándose con alguien de su entorno. Poco después habían opiniones a favor de ella: "Si pues, lo que pasa es que él no la entiende, no comprende que la "pobre" ha llevado una buena vida en el hogar paterno y él cree que,ahora, todo es trabajo para ella que es su esposa, no su esclava, etc.". Las opiniones a favor de él eran: " Hay hija, el tipo es una excelente persona, de muy buena familia y una excelente educación...el error está en ella pues no lo complementa como debería, etc., etc. Yo alcancé a escuchar una tercera opinión: "El fulano es un sinvergüenza, ha esperado tener tres hijos con la otra antes de parar la mano. Imagínate pues uno, en fin, es curiosidad; dos, experiencia...pero tres...tres ya es "puterío"...

Pero lo más interesante de la presente historia es lo que narraré a continuación:
Al poco tiempo de que la esposa se entera de la "aventura" de su amado, renunció a su trabajo y se metió a estudiar algo afín a la profesión del marido al mismo tiempo que tomó clases de manejo (el esposo conducía una camioneta), y sacó su brevete. La familia y los amigos estaban sorprendidos, no se explicaban esta actitud; ¿cómo en lugar de cuidar a su pareja "perdía" el tiempo en esas cosas y había dejado su trabajo de años?. Luego de permanecer el tiempo suficiente estudiando, se puso al frente de la empresa un día en que el esposo tuvo que viajar. Despidió a la secretaria y desde entonces ella la reemplazó. Debo aclarar que esta dama siempre hizo que él se sintiera importante a base de muchas actitudes de admiración hacia su cónyuge y, a pesar de que tenía carácter, siempre hizo gala de prudencia y autocontrol. Esta situación era ideal pues ciertamente el individuo era muy trabajador y muy capaz estando ella atenta a lo mínimo para que el hombre se pudiera desempeñar sin tropiezos...dicha prudencia terminaba cuando ella sentía que "no era lo suficientemente considerada" por su esposo a pesar de sus esfuerzos y atenciones de esposa...Las discusiones se sucedían con más frecuencia y terminaron cuando ella, enterada de la travesura de su pareja, calló la boca y tomó la decisión que ya les conté líneas arriba; cuando el esposo hizo aquel viaje.

Es un poco complicado para mí, relatarles esta historia, refiriéndome a que ella se hizo cargo de la "empresa". Lo que les puedo decir es que por la profesión de él, éste tenía que viajar a Lima en ciertas ocasiones; pero ella se encargó de "hacerle entender" que su propia presencia permitiría que él pudiera viajar más seguido. Esto tenía tanta lógica que el marido no se pudo negar (siendo probable que él sospechara de que ella sabía de la "aventura"...como que así era...), además éste disponía de más tiempo para "visitar" a la "fulana"...y así fue. Pasaron los años y todo el mundo pensó que ella era una tonta, que mientras se mataba trabajando, el "fulano" se daba la gran vida...así el "infiel" pudo procrear tres hijos que sumaban siete junto a los que tenía con su propia esposa.

Un día, sin querer, me enteré que él mantenía a su familia "postiza", solamente con los cachuelos que podía realizar por su parte. Se fue haciendo evidente que la esposa había antepuesto su inteligencia a su carácter, pues controlaba los ingresos al hacerse cargo de la caja. Ella efectuaba todos los pagos e intervenía inicialmente en todos los asuntos de modo que el esposo solamente llegaba a firmar. Los años seguían pasando y hasta la gente extraña sabía del asunto, simplemente por el apellido que llevaban los, ahora ya, jóvenes. Pero la esposa empresaria "no sabía absolutamente nada del asunto", era la que movilizaba al esposo en la camioneta, cuando era necesario mientras él consultaba algunas cosas con ella que ya se había especializado en el quehacer de la mencionada empresa. Los hijos ilícitos tenían que vivir a la sombra puesto que era "evidente" de que la verdadera esposa de papá "no sabía nada".

Personalmente, llegué a conocer el hogar ilícito...una casita sencilla, una señora igualmente sencilla, amable y con aspecto de sufrida en un entorno evidentemente de mucho menor calidad que en el verdadero hogar del protagonista. Yo podía entonces comparar ahora y entonces terminé de entender la sagacidad y cálculo de una anticipación magistral a los hechos que devendrían posteriormente. Ella siempre presentable, muy bien arreglada y de buen ánimo en todo momento, en todo lugar, en la casa o fuera de ella...y saben queridas amigas en que conluyó todo ésto ?....en que LA AMANTE, ANGUSTIADA, INSEGURA, TEMEROSA Y ASUSTADA PARECÍA REALMENTE LA ESPOSA...MIENTRAS QUE LA ESPOSA LOGRÓ CONVERTIRSE EN LA VERDADERA AMANTE DEL INFIEL"....

NOTICIA DE ÚLTIMA HORA...

¡¡¡ Albricias!!!! queridas amigas "engañadas"...siendo las 9 y 53 de la mañana de hoy lunes 12 de Enero del presente, mientras corregía este artículo, acabo de enterarme por el Noticiero de América; que en los EEUU acaban de elaborar una pastilla que actúa sobre ciertas áreas del cerebro del cónyuge "aburrido" para que "vuelva a enamorarse" de su pareja olvidada. El fármaco se denomina "La Pastilla de Cupido"...¿Será que éste y muchos otros artículos sobre problemas de infidelidad quedarán obsoletos?..."Será que la pastilla no será tan efectiva y tenga algunas limitaciones?...¿Será que nunca habrá nada tan efectivo que cuidar la propia imágen y tratar de "regar siempre el jardín" ?...Veremos, mientras tanto ojalá este modesto artículo sirva para algo...hasta que la "pastillita" agarre vuelo...Por mi parte dudo que el amor pueda controlarse químicamente pues...si Dios es amor, ¿podrá algo o alguien "controlarlo"? ...¿Qué dicen Uds. queridos amigos ?...Hasta pronto.